Llevas nueve meses esperando tener a tu bebé en brazos, no dudes ni un momento en abrazarlo, olerlo, sentirlo inmediatamente después de que nazca. Este primer contacto piel a piel con tu bebé fomenta el apego y marca el inicio de la lactancia exitosa. Debe ser parte de tu plan de parto y de crianza, no olvides platicarlo con tu ginecólogo y con tu pediatra.
Lo ideal es que no le des a tu bebé chupón ni botella hasta que esté bien establecida la lactancia, por lo menos durante el primer mes de vida.
Es importante que cuides tus pezones, te recomendamos dejarlos un rato al aire y cuando acabe de comer tu bebé aplica un poco de tu propia leche, esto te ayudará a que se protejan y no se lastimen.
Cómprate 1 o 2 brasiers para la lactancia que te queden bien al final del embarazo y una vez que te baje la leche, que pueden ser 4 o 5 días después del nacimiento de tu bebe cómprate más si lo ves necesario porque el pecho puede crecer mas. Es importante que estos sean de algodón, sin varilla y que tengan un buen soporte en los tirantes y espalda.
No es necesario que compres fórmula, confía en tu cuerpo y amamanta a libre demanda, vas a producir la leche que tu bebé necesita.