Lo más importante de ser parte del gran milagro de la vida, es confiar en el diseño original. Este diseño es tan fascinante, que cada mujer es capaz de dar a luz a su bebé. Cuando tu bebé esté listo para nacer, intercambiará contigo (a través de la placenta), ciertas sustancias y hormonas que abren el espacio suficiente en ti y lo ayudan a él a amoldar su cabecita y su cuerpo para poder nacer. Sabiendo esto, no estaría de más pedir una segunda opinión al respecto y meditar acerca de ¿quién quieres que te acompañe y atienda en tu parto?