Los bebés que no fueron amamantados por al menos 3 meses tienen un 27% mayor de riesgo de padecer asma si existen antecedentes familiares del padecimiento, en comparación con los bebés que fueron amamantados.


Los bebés que no fueron amamantados por al menos 3 meses tienen un 27% mayor de riesgo de padecer asma si existen antecedentes familiares del padecimiento, en comparación con los bebés que fueron amamantados.