Tu bebé pesa más de 650 gramos y se mueve mucho dentro de tí.
Su piel es ahora rojiza y delgada. Se cubre con una untura blanca y grasosa que protege su piel llamada vernix caseosa.
Se encuentra flotando en el líquido amniótico que lo protege de impactos y ruidos, le permite regular su temperatura, moverse libremente y practicar funciones como tragar, respirar y digerir.